PROCESOS: SILVICULTURA Preparación del suelo y de las semillas
¿Qué es la silvicultura?
La silvicultura es el arte y la ciencia aplicada de producir y mantener una plantación forestal por medio del cuidado del crecimiento y salud de los árboles que lo integran, con el fin de obtener algún tipo de producto o resultado. La silvicultura combina elementos de disciplinas científicas como la botánica, la química, la ecología, la ingeniería y la economía, además del uso de tecnología de punta para mejorar los procesos y la producción.
La silvicultura se considera un arte porque requiere de creatividad y destreza en el manejo y uso de recursos naturales y, sobre todo, porque ofrece también la posibilidad de buscar la belleza en cada etapa de la producción, desde la plantación hasta la extracción de los recursos. Por ello, un buen proceso de silvicultura considera el entorno para embellecerlo de forma armoniosa y sostenible.
¿Cuál es la ruta que siguen los árboles de una plantación forestal de CMPC?
Aunque cada plantación forestal es única debido a los factores ambientales, productivos e históricos que la afectan, la plantación, el manejo y la cosecha de los árboles sigue, a grandes rasgos, un proceso común para aprovechar al máximo los recursos, tener el menor impacto posible en el medio ambiente y promover su cuidado y regeneración.
En el caso de los recursos de CMPC, el proceso forestal se inicia en los árboles semilleros, desde donde se recogen las semillas para llevarlas a los laboratorios, donde los científicos pueden plantar y controlar la germinación y la calidad y, una vez que hayan brotado, trasladar las plántulas más firmes y sanas a los invernaderos. Allí, en condiciones controladas de humedad, temperatura y alimentación, los brotes son revisados de manera constante y solo cuando están lo suficientemente fuertes como para sobrevivir por sí mismos son trasladados a viveros al aire libre y finalmente al terreno donde serán plantados.
¿Qué es un invernadero?
Una vez decidida la especie que se cultivará, se trasladan las plántulas que han germinado en los laboratorios a los invernaderos, ya que durante su primer periodo de crecimiento las plantas nuevas son demasiado débiles como para valerse por sí mismas en las intensas condiciones de las plantaciones forestales.
En los invernaderos, que son instalaciones en las que se provee a las plantas con las condiciones de crecimiento más favorables para su desarrollo inicial, se utilizan tecnologías especiales para controlar factores ambientales como la temperatura, la humedad y la radiación solar. Asimismo, para conseguir el mejor crecimiento posible de las plantas, se mantiene un estricto control de la iluminación, el riego y especialmente la nutrición. Para ello se emplean fertilizantes especiales en cada etapa de crecimiento, además de agregar hongos que interactúan con las raíces para ayudarlas a absorber los nutrientes, un proceso natural conocido como micorrización.
Uno de los elementos más importantes de los invernaderos es su techo, que protege a las plantas de las heladas y permite regular la temperatura, manteniéndola en el rango ideal para el crecimiento, entre 18 y 21 ºC. El invernadero también cuenta con ventanas especiales llamadas lucarnas, que permiten que salga el aire caliente, mejoran la ventilación y controlan la temperatura. Además, cuentan con un sistema de iluminación especializado que favorece algunas de las funciones de las plantas, como el crecimiento, la floración y el enraizamiento.
Además, el invernadero cuenta con mallas térmicas que mantienen la temperatura ambiente en niveles óptimos por periodos más prolongados y con cortinas plegables llamadas faldones, que controlan la entrada y salida del aire.
Para darle la mejor nutrición a cada planta se emplea un sistema de fertirrigación, en un carro de riego que recorre el invernadero de un lado a otro y que cuenta con microaspersores que rocían agua y fertilizantes para nutrir las plantas y controlar la humedad del aire. Bajo los mesones donde se encuentran las plantas hay placas calefactoras que regulan la temperatura del sustrato en el que están puestas, lo que ayuda al enraizamiento. Cada uno de estos elementos se mantiene conectado a un sistema de monitoreo en línea para maximizar su efectividad.
Por lo general, el traslado de las plantas desde los laboratorios a los invernaderos se realiza en primavera o a principios del verano. Una vez que las plantas están en condiciones óptimas, se establecen en el terreno de la plantación durante el invierno siguiente.
Desde 2013, CMPC centralizó la producción de plantas al cerrar su vivero en Los Ángeles y concentró la producción en uno solo altamente mecanizado, ubicado en la comuna de Cabrero. En este vivero, que se llama Carlos Douglas, se pueden producir unos 37 millones de plantas de pino, eucalipto y especies nativas para los procesos de forestación y reforestación.
Algunas de las especies nativas que crecen en estos invernaderos son el ruil, hualo, quillay, adesmia y araucaria, entre otras.
¿Cuál es el ciclo de una plantación forestal?
El ciclo forestal comienza cada temporada con la preparación del suelo de áreas destinadas a nuevas plantaciones, lo que incluye el tratamiento de los remanentes de la cosecha anterior y vegetación menor, soltar la tierra a través de surcos para que las raíces de los árboles puedan penetrar con mayor facilidad en busca de agua y nutrientes y, finalmente, realizar el establecimiento de las plantas. Todo este proceso se realiza anualmente entre los meses de mayo y septiembre, dado que se requiere de un mayor nivel de humedad en el suelo para instalar las nuevas plantas. Sin embargo, el proceso total desde el establecimiento hasta la cosecha de un árbol, dependiendo de la especie, puede tardar más de veinte años.
Este lento crecimiento de los árboles es monitoreado por silvicultores expertos. Un buen manejo y control del crecimiento permite que cerca del 95% de las plantas puestas originalmente en la tierra se conviertan en árboles útiles para la cosecha.
¿Cómo se prepara una plantación forestal?
Antes de comenzar una plantación, el silvicultor debe analizar cuáles son las opciones que tiene para usar de la mejor manera los recursos disponibles y así obtener productos de buena calidad.
Lo primero que necesita considerar son las características del terreno. Entre otros aspectos, analiza el tipo de suelo, la inclinación, el uso que se le ha dado históricamente, las condiciones climáticas y su ubicación respecto de caminos y centros de acopio. Todos estos factores influyen en el crecimiento del bosque, la dificultad o facilidad para su mantención y los resultados esperables.
Con esta información se decide la especie que se plantará y se efectúan los procesos adecuados para aprovechar el área, según el propósito que se quiera dar a la plantación forestal. El silvicultor puede considerar especies que ya han sido utilizadas en el mismo terreno, u optar por otras capaces de adaptarse a climas diversos y que tengan una gran productividad en poco tiempo. Este es el caso de las tres especies más comunes de las plantaciones forestales en Chile: el pino radiata, el eucalipto globulus y el eucalipto nitens, que ofrecen una excelente relación entre la calidad de suelo y los productos obtenidos.
Por último, hay aspectos más prácticos que el silvicultor debe tener en cuenta durante la planificación, como asegurarse de que cumpla con todas las leyes vigentes en temas laborales, medioambientales y económicos en el país; la organización de faenas, la maquinaria indispensable y los trabajadores necesarios en cada etapa; la logística y los posibles contratiempos, que determinarán qué tan difícil será transportar los materiales y productos.
¿Se puede plantar más de una vez en el mismo sitio?
Si bien es posible utilizar varias veces un mismo lugar en múltiples plantaciones, el buen resultado de este proceso dependerá tanto de las condiciones como de la calidad del suelo, el clima, la silvicultura anterior y de las faenas de manejo a aplicar, como la preparación de suelo, la fertilización, y la calidad en la plantación.
Contenidos de esta sección
1. Silvicultura
Preparación del suelo y de las semillas
Establecimiento de la plantación
Manejo y cosecha
2. Transformación
Plantas de procesamiento
Aserraderos, remanufactura y plywood
Plantas de celulosa
Fábricas de papel
Fábricas de tissue
3. Investigación
Ciencia forestal
Calidad madera
Biotecnología
Fitopatología